Blog personal dedicado al análisis de la política nacional española y la local pitiusa y balear. Este es el blog de un militante de Unión Progreso y Democracia. Español, agnóstico, librepensador, demócrata.

viernes, 22 de mayo de 2009

Hacia la confluencia veraz con la Europa Social....

Decía ayer que los miembros y hasta simpatizantes de UPyD vivimos un momento dulce en el que el diálogo de base puede tener eco y cabida en las lineas maestras del partido a nivel nacional (puede tenerlo y puede no tenerlo: todo depende de la calidad del contenido, pero ya no de la autoridad, real o supuesta de quien lo produce).

Un ejemplo de esto es la iniciativa que traigo a colación hoy en este post. En el seno de nuestras reuniones del Comité Electoral Local de Ibiza, nuestro compañero José (hasta ahora simpatizante, y espero que pronto afiliado) ha mostrado su inquietud e interés por hacernos ver un hecho de radical trascendencia en el panorama político de España. Se trata de comprobar que, a pesar de los años transcurridos desde unestra incorporación a la U.E., del incremento global palpable de la riqueza desde entonces, de lo abultado de las cifras macroeconómicas y de cuentas de resultados de las grandes corporaciones, todavía no hemos logrado converger de manera real con el estado del bienestar que tanto envidiamos a los paises fundadores de la U.E.

Puede que por un problema de hábito mental, el español medio se resigna a mirar con envidia cómo las familias francesas danesas, suecas, alemanas etc. tienen presupuesto estatal suficiente para recibir (por ejempo) una asignación mensual por hijo nacido, hasta la mayoría de edad de éste, e incluso más tarde, que en el caso de Alemania y por no extenderme más es de 120€ mensuales. Aquí, como logro máximo hemos conseguido el pago único de 2000€ por bebé nacido (y espérame, que no vendrán a llamar a tu puerta para tramitar la ayuda). Hay muchos más ejemplos: dos años de baja maternal totalmente cubierta por el estado en Suecia, Ayudas a la formación universitaria en Dinamarca, Etc. Etc. No se trata únicamente de subsidios a la miseria y la necesidad, son puntales reales al ciudadano y la familia, merecidas en tanto en cuanto son financiadas con los impuestos de todos.

Nos resignamos también y envidiamos las condiciones de la jubilación de esos países, sus carreteras, sus hospitales, su atención a la tercera edad, su sanidad, su enseñanza, su bien estructurada y cívica sociedad civil con múltiples resortes, pero sobre todo, nos resignamos a convivir aún con la miseria, el deshaucio, con el paro estructural, con los privilegios de clase no escritos.

Contemplamos, sobre todo y con biliar envidia, cómo la burocracia de esos países está puesta al servicio del ciudadano y la resolución de sus problemas y nó al revés. Y algo que a alguno de nuestros compañeros le reconcome las entrañas, el ver todavía hoy, en España hacinamientos de chabolas en los arrabales y gentes en la indigencia, ¡con tanta riqueza y tanta especulación urbanística!

El análisis de todo ello, no por ser conocido, no deja de ser lacerante: la infame administración y despilfarro del dinero de nuestros impuestos han hecho cierta aquella frase lapidaria de Pedro Ruiz: España es un país con impuestos suecos y servicios africanos... Se despilfarra dinero en la ineficaz administración autonómica, en el concordato con la santa sede, en subvenciones veladas y subsidios encubiertos, en la compra miserable de las voluntades de determinados sectores de la sociedad, a cambio de su voto incondicional, sin darse cuenta éstos de que no hacen si no perpetuar el estatus de clase a la que se han aupado nuestros políticos y funcionarios de rango.

La acción política en el seno de la U.E. ha de consistir básicamente y según nuestro punto de vista, en ejecutar todas aquellas reformas consecuentes con el objetivo de igualarnos en un plazo no muy dilatado de tiempo con aquellas naciones que todavía hoy miramos con indisimulada envidia. Y para ello debemos hacer hincapié en la real distancia que nos separa de su nivel de cobertura y asistencia social. No debemos echar la culpa a nuestro secular atraso o a nuestra siempre ineficaz estructura productiva. Tenemos mimbres de sobra para poder dar, hoy mismo, cobertura y cumplir con los aspectos de política del bienestar de los países punteros de Europa. Solo que no nos hemos dado cuenta de ello, todavía.

Es por ello que, fruto del dialogo entre compañeros, hemos alumbrado el texto del Manifiesto por la confluencia real de España con la Europa Social, el contenido ideológico del cual intentaremos, aprovechando la circunstancia del próximo I congreso de UPyD, sea incorporado con todas las consecuencias en los estatutos de UPyD, para que sea este objetivo asumido con toda la vehemencia de que sólo nosotros somos capaces.

Deseamos que todos aquellos que se sientan interesados por este llamamiento, se hagan eco del mismo, lo difundan por todos los medios posibles a su alcance y hagan de este llamamiento un clamor social, cuenco de la indignación ciudadana por el desgobierno y el caos que no nos merecemos, herederos todavía del concepto de clases oligárquicas que todavía gobierna nuestros hábitos mentales.

Pinchar el link para leer y adherirse al Manifiesto por la confluencia real de España con la Europa Social

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